Nos ubicas en Pirámide 565, paradero 11 ½ de Santa Rosa. Comuna de San Miguel, Santiago de Chile.
Nuestras actividades se despliegan durante la semana; nuestra celebración dominical es a las 10:15. Bienvenid@s.
ATENCIÓN
jueves, 30 de septiembre de 2010
Preparemos el próximo Día del Señor
jueves, 23 de septiembre de 2010
Preparemos el próximo Día del Señor
También se proclamarán los siguientes textos:
Primera Lectura Amós 6, 1. 4-7
Salmo 145, 7-10
Segunda Lectura 1Timoteo 6, 11-16
(Dibujo: Cerezo Barredo)
domingo, 19 de septiembre de 2010
Se puede servir a Dios con el dinero, pero no se debe servir al dinero como a un dios
En el momento de reflexionar la Palabra, nos dijo que debíamos tener presente el contexto de las otras lecturas proclamadas, especialmente la primera (contra los que pisotean al indigente para hacer desaparecer al pobre) y el Salmo que alaba al Señor "que alza al pobre". Es decir, el mensaje del Señor es a favor del pobre. Entonces, cuando con claridad indica que no se puede servir a Dios y al dinero, nos previene de la tentación, en nuestras sociedades consumistas y materialistas de poner en primer lugar al dinero (servirlo), por sobre Dios (servir al necesitado).
Nos recordó que el amor al dinero es causante de la mayoría de los males que conocemos: el tráfico de armas y drogas, por ejemplo, ocurren porque se pone en primer lugar la ganancia desmedida de dinero. Posteriormente indicó que esta ansia por el dinero se revela también en los casos que hoy más nos preocupan: los mineros atrapados en Copiapó, porque los dueños de la mina se ahorraron dinero en vez de construir un escape seguro; y los mapuche en huelga de hambre, entre otras cosas, debido a que históricamente los poderosos les han despojado de su tierra.
Por último, nos invitó a orar para que no nos dejemos seducir por el apego al dinero y seamos capaces de utilizarlo para servir a los que lo necesitan.
Gloria a Ti, Señor.
jueves, 16 de septiembre de 2010
Preparemos el próximo Día del Señor
domingo, 12 de septiembre de 2010
Invitados a acoger la Misericordia de Dios, aprendiendo a ser misericordiosos
Nos dijo que las 3 parábolas tienen en común la pérdida: la oveja, la moneda y el hijo pródigo. Y el centro de las tres es que son reflejo de la Misericordia del Padre Dios.
Reflexionaba que sucede igual en nuestras vidas cuando andamos perdidos, descarriados: Jesús nos encuentra para volvernos al buen camino.
Por otro lado, nos hizo a reconocer que la misericordia, como muchas otras cosas del camino de Jesús, nos cuestan mucho. Pero hay que pedirle al mismo Jesús que nos la dé.
Con eso, todos podemos hacer ese trabajo, el servicio a los demás. Todos somos invitados a ser buenas ovejas, buenas personas, en el entorno que nos rodea: amigos, familia, vecinos...En su nombre y compañía.
Pidiendo, finalmente, que el Señor nos acompañe siempre para tener esa fuerza y esa luz necesaria para servir a los demás.
Gloria a Ti, Señor.
jueves, 9 de septiembre de 2010
Preparemos el próximo Día del Señor
También se proclamarán los siguientes textos:
Primera Lectura Éx 32, 7-11.13-14
(Dibujo: Cerezo Barredo)
domingo, 5 de septiembre de 2010
Tomarnos en serio el compromiso de ser Cristianos
El Padre reflexionando la Palabra nos indicaba que en nuestra sociedad actual la palabra cristiana es considerada "una más" en el debate del mundo, por ello debemos dar testimonio con nuestra vida de lo que creemos. No basta ser bautizados: para que nuestra palabra tenga fuerza tiene que acompañarse con la consecuencia de vida.
Puso como ejemplo el de la percepción que se tenía del Papa Juan Pablo II: muchos no estaban de acuerdo con sus enseñanzas (especialmente los jóvenes respecto a la moral sexual), sin embargo todos reconocen en él una coherencia entre su vida y su mensaje.
Nos propone como fuente de inspiración para intentarlo al mismo Jesús: pensar, vivir, amar como Él. Y, retomando el texto evangélico, "sentarnos a calcular". Así como habitualmente no tenemos dinero suficiente para realizar grandes proyectos; entonces, damos un pie y buscamos los recursos faltantes para completar lo necesario. Nos invitó a que en nuestra vida hiciésemos igual: nosotros ponemos lo que tenemos, el resto lo pone Jesús: Él es la fuente, la fuerza e incluso el refugio cuando nos cansa la tarea.
Finalmente nos exhortó a que si queremos ser cristianos, asumamos lo que creemos, viviendo con alegría, sabiendo que en el Señor encontraremos los que nos falte cuando desfallezcamos.
Gloria a Ti, Señor.
jueves, 2 de septiembre de 2010
Preparemos el próximo Día del Señor: 23º del Año
El Domingo 5 de Septiembre la Iglesia proclama el siguiente Evangelio:
Aclamación al Evangelio
Aleluya. Que brille sobre mí la luz de tu rostro, y enséñame tus preceptos. Aleluya.
Evangelio Lc 14, 25-33
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas.
Junto con Jesús iba un gran gentío, y Él, dándose vuelta, les dijo: Cualquiera que venga a mí y no me ame más que a su padre y a su madre, a su mujer y a sus hijos, a sus hermanos y hermanas, y hasta a su propia vida, no puede ser mi discípulo. El que no carga con su cruz y me sigue, no puede ser mi discípulo. ¿Quién de ustedes, si quiere edificar una torre, no se sienta primero a calcular los gastos, para ver si tiene con qué terminarla? No sea que una vez puestos los cimientos, no pueda acabar y todos los que lo vean se rían de él, diciendo: “Este comenzó a edificar y no pudo terminar”. ¿Y qué rey, cuando sale en campaña contra otro, no se sienta antes a considerar si con diez mil hombres puede enfrentar al que viene contra él con veinte mil? Por el contrario, mientras el otro rey está todavía lejos, envía una embajada para negociar la paz. De la misma manera, cualquiera de ustedes que no renuncie a todo lo que posee, no puede ser mi discípulo.
(Dibujo: Cerezo Barredo)