Pertenecemos a la Parroquia Santo Cura de Ars, atendida pastoralmente por la Congregación de los Sacerdotes del Sagrado Corazón de Jesús (Dehonianos).

Nos ubicas en Pirámide 565, paradero 11 ½ de Santa Rosa. Comuna de San Miguel, Santiago de Chile.
Nuestras actividades se despliegan durante la semana; nuestra celebración dominical es a las 10:15. Bienvenid@s.





ATENCIÓN

A contar del 1 de Enero de 2013 las Meditaciones diarias del evangelio se encuentran en: http://pazamoryalegria.blogspot.com/

jueves, 29 de julio de 2010

Preparemos el Próximo Día del Señor


Domingo 1 de agosto. La Iglesia proclama el siguiente Evangelio:

Aclamación al Evangelio

Aleluya. Felices los que tienen alma de pobres, porque a ellos les pertenece el Reino de los Cielos. Aleluya.

Evangelio Lc 12, 13-21

Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas.

Uno de la multitud dijo al Señor: «Maestro, dile a mi hermano que comparta conmigo la herencia». Jesús le respondió: «Amigo, ¿quién me ha constituido juez o árbitro entre ustedes?» Después les dijo: «Cuídense de toda avaricia, porque aun en medio de la abundancia, la vida de un hombre no está asegurada por sus riquezas». Les dijo entonces una parábola: «Había un hombre rico, cuyas tierras habían producido mucho, y se preguntaba a sí mismo: “¿Qué voy a hacer? No tengo dónde guardar mi cosecha”. Después pensó: “Voy a hacer esto: demoleré mis graneros, construiré otros más grandes y amontonaré allí todo mi trigo y mis bienes, y diré a mi alma: Alma mía, tienes bienes almacenados para muchos años; descansa, come, bebe y date buena vida”. Pero Dios le dijo: “Insensato, esta misma noche vas a morir. ¿Y para quién será lo que has amontonado?” Esto es lo que sucede al que acumula riquezas para sí, y no es rico a los ojos de Dios».

Palabra del Señor. R. Gloria a ti, Señor Jesús.

domingo, 25 de julio de 2010

Orando con "confianza porfiada"



El Evangelio proclamado fue tomado de San Lucas (11, 1-13): una catequesis de Jesús sobre la Oración.
Hoy nuestra Eucaristía fue presidida por el padre Julián, quien nos dijo que el Señor enseña a orar a Dios como padre querido y como a un amigo, es decir, con confianza porfiada como Abraham en la primera lectura (Génesis 18, 20-21.23-32).

Nos contaba que a veces alguien le decía que no podía orar por estar enojado con Dios, a lo que él le indicaba que ¡se lo dijera a Dios!, porque a los amigos se les cuenta todo lo que nos pasa y se les dice si tenemos algo contra ellos, así se aclaran las cosas. A Él no le molesta eso. lo que sí "le duele" es que no le tengamos confianza.

Además, volviendo al ejemplo de la primera lectura, nos recordó que si oramos por los demás, Dios piensa: "si él le tiene misericordia, ¿cómo no se la tendría yo?".

Por último, nos indicó que el poner en oración lo que nos pasa, lo que nos duele, lo que nos entristece (y lo que les pasa, les duele, les entristece a los demás) es mucho más sanador que las terapias.


Pidamos por todas las personas que conocemos (amigos, parientes, vecinos, compañeros, etc.) que tengan algún padecimiento físico, moral o espiritual para que puedan recibir el consuelo del Señor.

Roguemos al Señor.

Escúchanos, Señor, te rogamos.


jueves, 22 de julio de 2010

Preparémonos para el próximo Día del Señor: Domingo 18 del Tiempo Común

El siguiente Domingo, 25 de Julio, la Iglesia proclama este Evangelio:

Aclamación al Evangelio

Aleluya. Han recibido el espíritu de hijos adoptivos, que nos hace llamar a Dios «¡Abbá!», es decir, Padre. Aleluya.

Evangelio Lc 11, 1-13

Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas.

Un día, Jesús estaba orando en cierto lugar, y cuando terminó, uno de sus discípulos le dijo: «Señor, enséñanos a orar, así como Juan enseñó a sus discípulos». Él les dijo entonces: «Cuando oren, digan: Padre, santificado sea tu Nombre, que venga tu Reino, danos cada día nuestro pan cotidiano; perdona nuestros pecados, porque también nosotros perdonamos a aquéllos que nos ofenden; y no nos dejes caer en la tentación». Jesús agregó: «Supongamos que alguno de ustedes tiene un amigo y recurre a él a medianoche, para decirle: “Amigo, préstame tres panes, porque uno de mis amigos llegó de viaje y no tengo nada que ofrecerle”, y desde adentro él le responde: “No me fastidies; ahora la puerta está cerrada, y mis hijos y yo estamos acostados. No puedo levantarme para dártelos”. Yo les aseguro que aunque él no se levante para dárselos por ser su amigo, se levantará al menos a causa de su insistencia y le dará todo lo necesario. También les aseguro: pidan y se les dará, busquen y encontrarán, llamen y se les abrirá. Porque el que pide, recibe; el que busca, encuentra; y al que llama, se le abrirá. ¿Hay entre ustedes algún padre que da a su hijo una serpiente cuando le pide un pescado? ¿Y si le pide un huevo, le dará un escorpión? Si ustedes, que son malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¡cuánto más el Padre del cielo dará el Espíritu Santo a aquéllos que se lo pidan!».

Palabra del Señor. R. Gloria a ti, Señor Jesús.

domingo, 18 de julio de 2010

Aprendiendo a ser Acogedores


Hoy tuvimos Liturgia presidida por el Ministro Dionisio.
El Evangelio proclamado hoy fue: Lucas 10, 38-42: en casa de Marta y María.
Él nos señaló que el Señor nos invita a ser acogedores. Precisó que la invitación no es sólo a quienes "dan la cara" en la Comunidad, sino a todos. Y siempre.
Nos recordó que estamos viviendo el espíritu de la Misión Continental, convocada por los Obispos de Latinoamérica en Aparecida. Eso significa tener disposición permanente para recibir las inquietudes, dudas y dolores de los hermanos que se nos acerquen. Así hacemos vida el Evangelio cada día.

Gloria a Ti, Señor Jesús.

viernes, 16 de julio de 2010

jueves, 15 de julio de 2010

Preparémonos para el próximo Día del Señor: Domingo 16 del Tiempo Común


El siguiente Domingo, 18 de Julio, la Iglesia proclama el siguiente Evangelio:

Aclamación al Evangelio

Aleluya. Felices los que guardan la Palabra de Dios con un corazón bien dispuesto, y dan fruto gracias a su constancia. Aleluya.

Evangelio Lc 10, 38-42

Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas.

Jesús entró en un pueblo, y una mujer que se llamaba Marta lo recibió en su casa. Tenía una hermana llamada María, que sentada a los pies del Señor, escuchaba su palabra. Marta, que estaba muy ocupada con los quehaceres de la casa, dijo a Jesús: «Señor, ¿no te importa que mi hermana me deje sola con todo el trabajo? Dile que me ayude». Pero el Señor le respondió: «Marta, Marta, te inquietas y te agitas por muchas cosas, y sin embargo, una sola cosa es necesaria. María eligió la mejor parte, que no le será quitada».

Palabra del Señor. R. Gloria a ti, Señor Jesús.

(dibujo: Cerezo, www.servicioskoinonia.org)

domingo, 11 de julio de 2010

La Necesidad del Prójimo desarma nuestros planes


Hoy la Eucaristía fue presidida por nuestro párroco, el Padre Hernán. El Evangelio de Lucas 10, 25-37: la Parábola del Buen Samaritano hizo que reflexionara con nosotros acerca de la Solidaridad.

Nos dijo que mientras los representantes de la religión oficial no tenían tiempo para el afligido, el samaritano (como ocurre con Jesús hacia nosotros) tuvo compasión; cambió sus planes por él. El ideal cristiano -lo que nos enseña Jesús- es que la necesidad del prójumo debe desarmar nuestros planes. Pero advirtió que la actitu no debe ser sólo un sentir ("pobrecito"), sino un actuar: la verdadera solidaridad debe hacer preguntarnos "¿Qué puedo hacer para ayudar a superar este sufrimiento?". Por todo ello, nos invitó a preguntarnos "¿Somos samaritanos de los demás?", recordándonos que ante el sufrimiento de otros lo que se nos preguntará al final será: "¿Qué hiciste tú?" (cf. Mateo 25, 31-46)

Gloria a Ti, Señor.

viernes, 9 de julio de 2010

Preparémonos para el próximo Día del Señor: Domingo 15 del Tiempo Comùn


Lectura del santo Evangelio según san Lucas 10, 25-37
Un doctor de la Ley se levantó y le preguntó para ponerlo a prueba: «Maestro, ¿qué tengo que hacer para heredar la Vida eterna?»
Jesús le preguntó a su vez: «¿Qué está escrito en la Ley? ¿Qué lees en ella?»
El le respondió: «Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con todas tus fuerzas y con todo tu espíritu, y a tu prójimo como a ti mismo.»
«Has respondido exactamente, le dijo Jesús; obra así y alcanzarás la vida.»
Pero el doctor de la Ley, para justificar su intervención, le hizo esta pregunta: «¿Y quién es mi prójimo?»
Jesús volvió a tomar la palabra y le respondió: «Un hombre bajaba de Jerusalén a Jericó y cayó en manos de unos ladrones, que lo despojaron de todo, lo hirieron y se fueron, dejándolo medio muerto. Casualmente bajaba por el mismo camino un sacerdote: lo vio y siguió de largo. También pasó por allí un levita: lo vio y siguió su camino. Pero un samaritano que viajaba por allí, al pasar junto a él, lo vio y se conmovió. Entonces se acercó y vendó sus heridas, cubriéndolas con aceite y vino; después lo puso sobre su propia montura, lo condujo a un albergue y se encargó de cuidarlo. Al día siguiente, sacó dos denarios y se los dio al dueño del albergue, diciéndole: "Cuídalo, y lo que gastes de más, te lo pagaré al volver."
¿Cuál de los tres te parece que se portó como prójimo del hombre asaltado por los ladrones?»
«El que tuvo compasión de él», le respondió el doctor.
Y Jesús le dijo: «Ve, y procede tú de la misma manera.»
Palabra del Señor.

jueves, 1 de julio de 2010

Preparémonos para el próximo Día del Señor


El siguiente Domingo, 4 de Julio, el 14º del Tiempo Común, la Iglesia proclamará el siguiente Evangelio:

Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas (Lc 10, 1-12.17-20).

El Señor designó a otros setenta y dos, además de los Doce, y los envió de dos en dos para que lo precedieran en todas las ciudades y sitios adonde Él debía ir. Y les dijo: «La cosecha es abundante, pero los trabajadores son pocos. Rueguen al dueño de los sembrados que envíe trabajadores para la cosecha. ¡Vayan! Yo los envío como a ovejas en medio de lobos. No lleven dinero, ni provisiones, ni calzado, y no se detengan a saludar a nadie por el camino. Al entrar en una casa, digan primero: “¡Que descienda la paz sobre esta casa!” Y si hay allí alguien digno de recibirla, esa paz reposará sobre él; de lo contrario, volverá a ustedes. Permanezcan en esa misma casa, comiendo y bebiendo de lo que haya, porque el que trabaja merece su salario. No vayan de casa en casa. En las ciudades donde entren y sean recibidos, coman lo que les sirvan; sanen a sus enfermos y digan a la gente: “El Reino de Dios está cerca de ustedes”. Pero en todas las ciudades donde entren y no los reciban, salgan a las plazas y digan: “¡Hasta el polvo de esta ciudad que se ha adherido a nuestros pies, lo sacudimos sobre ustedes! Sepan, sin embargo, que el Reino de Dios está cerca”. Les aseguro que en aquel Día, Sodoma será tratada menos rigurosamente que esa ciudad». Los setenta y dos volvieron y le dijeron llenos de gozo: «Señor, hasta los demonios se nos someten en tu Nombre». Él les dijo: «Yo veía a Satanás caer del cielo como un rayo. Les he dado poder para caminar sobre serpientes y escorpiones y para vencer todas las fuerzas del enemigo; y nada podrá dañarlos. No se alegren, sin embargo, de que los espíritus se les sometan; alégrense más bien de que sus nombres estén escritos en el cielo».

Palabra del Señor.
Gloria a Ti, Señor Jesús.