6 de marzo de 2012
Martes de la Segunda Semana de Cuaresma
Lecturas de hoy:
Isaías 1, 10. 16-20 / Salmo 49, 8-9. 16bc-17. 21. 23 Al que va por el buen camino, le haré gustar la salvación de Dios.
EVANGELIO
+ Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo 23, 1-12
Jesús dijo a la multitud y a sus discípulos:
«Los escribas y fariseos ocupan la cátedra de Moisés; ustedes hagan y cumplan todo lo que ellos les digan, pero no se guíen por sus obras, porque no hacen lo que dicen. Atan pesadas cargas y las ponen sobre los hombros de los demás, mientras que ellos no quieren moverlas ni siquiera con el dedo.
Todo lo hacen para que los vean: agrandan las filacterias y alargan los flecos de sus mantos; les gusta ocupar los primeros puestos en los banquetes y los primeros asientos en las sinagogas, ser saludados en las plazas y oírse llamar "mi maestro" por la gente.
En cuanto a ustedes, no se hagan llamar "maestro", porque no tienen más que un Maestro y todos ustedes son hermanos. A nadie en el mundo llamen "padre", porque no tienen sino uno, el Padre celestial. No se dejen llamar tampoco "doctores", porque sólo tienen un Doctor, que es el Mesías.
Que el más grande de entre ustedes se haga servidor de los otros, porque el que se ensalza será humillado, y el que se humilla será ensalzado.»
Palabra del Señor.
MEDITACION
Jesús manifiesta respeto por la investidura, pero no avala la mala conducta de las autoridades religiosas de su tiempo (ni de ningún tiempo…)
Nosotros también debemos escuchar con atención y con disposición a acoger las enseñanzas de quienes han sido constituidos como cabezas de nuestras comunidades. Claro que la responsabilidad que cae sobre ellas es muy exigente, según transmite Isaías: “¡Lávense, purifíquense, aparten de mi vista la maldad de sus acciones! ¡Cesen de hacer el mal, aprendan a hacer el bien! ¡Busquen el derecho, socorran al oprimido, hagan justicia al huérfano, defiendan a la viuda!”
Muy pocos (si no es que ninguno) logran pasar tamaña prueba de “pureza”…
Por eso, el llamado es a no elevar a nadie por sobre los demás, porque sólo Uno está por sobre todos: nuestra fe no debe ponerse en personas, cualquiera sea su investidura, sólo en el Hijo de Dios.
Y necesitamos recordar que quienes comprenden la autoridad como un servicio son “las que van por buen camino y gustarán la salvación”.
Sabemos, Señor, que gracias a tu tremendo amor, aunque nuestros pecados sean color escarlata, se volverán blancos como la nieve. Enséñanos, tú que no viniste a ser servido sino a servir, a mostrarnos agradecidos, sirviendo a nuestra vez a los demás.
Paz, Amor y Alegría para tu día y tu vida.
Miguel.
No hay comentarios:
Publicar un comentario